miércoles, 6 de junio de 2007

Discusión perdurable

La excelente tarea del grupo chileno CineSubtitulado me permitió acceder a la película Enduring love -Amor perdurable-, que por estas latitudes se conoce con el nombre de El intruso.

El film, basado en la novela de McEwan y producido por el propio autor, logra generar la misma sensación de ahogo creciente que también proponía el texto. Y eso ya es un acierto. Por lo demás, está condenado al debate interminable sobre las transposiciones: ¿Es mejor el libro, o es mejor la película?.

Por mi parte sólo puedo decir que me siento satisfecho cuando la versión cinematográfica logra dar una vuelta de tuerca sobre el texto, sorprender en algo, romper con el verosímil literario e instalar una narración nueva. Claro que esto no siempre pasa. De hecho, no pasa casi nunca.

Les dejo un fragmento que extraje del comienzo del film: la famosa escena del globo. ¿Está a la altura de lo que imaginamos cuando leíamos la novela? Este post reclama sus comentarios.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es verdad, no es fácil encontrar películas que estén a la altura de lo que hemos leído. Pero en este caso creo que, gracias al inconfundible talento de McEwan como escritor y productor, se logra reproducir la confusión del momento: ¿quién se suelta primero?.
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Felicitaciones por el Blog!!¿Cuándo vas a "falsificar" Expiación de McEwan?
Besotes Enormes,

Chamana dijo...

Por supuesto que no leí el libro…pero esto no me va impedir opinar esta vez. Y creo que daré un motivo más de conflicto a tu disquisición: ¿por qué las imágenes despiertan en mí el deseo de leer la novela, más aún que las palabras que reseñan el libro -y más allá del excelente falsificador, of course!-?

Anónimo dijo...

Excepto la escena del globo, donde la realidad visual se impone por mucho sobre cualquier imagen que pueda surgir de la lectura del libro, el resto del film me pareció que carecía de la contundencia del libro. Le falta tiempo, no se logra la tensión desesperada que si se plantea en el relato escrito. El personaje de Jed Parry en ningun momento logra captar lo patológico del cuadro psiquíatrico descripto por Mac Ewan.